Conectar con la naturaleza nos aporta cantidad de beneficios a nivel físico, psicológico y emocional. Es algo que sabemos pero que muchas veces no prestamos atención. Andamos demasiado ocupados en nuestras rutinas, trabajos y obligaciones. Vivimos engullidos por la rapidez, los horarios y la productividad que nos exige la vida moderna. ¿Te suena?
En este post vamos a descubrir todos los beneficios que nos aporta conectar con la naturaleza, prácticas para acercarnos a ella, estudios y casos alrededor del mundo sobre cómo influye el entorno natural en el ser humano, un apartado especial dedicado a l@s niñ@s, mi experiencia personal y profesional, un ejercicio de mindfulness y libros recomendados.
¡Espero que lo disfrutes mucho! Y lo más importante, que después de leerlo te animes a conectar con la naturaleza y a experimentar por ti mism@ todas sus bondades.
La naturaleza es nuestro hogar
El ser humano ha evolucionado durante miles de años en un entorno natural. El paso a la vida urbana es relativamente reciente.
Hace menos de medio siglo el 70% de la población mundial vivía en zonas rurales. Actualmente, más de la mitad de la población vive en áreas urbanas y se estima que en el año 2050 este porcentaje supere el 68%.
Según el investigador Yoshifumi Miyazaki (autor del libro: Shinrin Yoku – Baños curativos de bosque), vivimos en una sociedad moderna con cuerpos que aún están adaptados al medio natural.
La urbanización ha modificado nuestra relación con el medio, disminuyendo la calidad y la cantidad de contacto con entornos naturales.
La vida en la ciudad nos expone a factores estresantes de manera continua: ruido incesante, horarios, humo, sirenas, gente corriendo por las aceras, aire contaminado, carteles publicitarios, cada vez más tiempo entre cuatro paredes, siempre ocupados, conectados constantemente a la tecnología…
Muchos científicos consideran que nuestro cerebro no ha sido creado para recibir tal bombardeo de información. Esto nos expone a un mayor riesgo de desarrollar problemas de salud, sobre todo de salud mental. (Estudio)
Volver a conectar con la naturaleza es una necesidad vital para cualquier persona que desee sentirse bien a todos los niveles: físico, psicológico y emocional.
La naturaleza es una fuente enorme de vitalidad, no importa dónde vivas, siempre vas a encontrar espacios donde establecer esa conexión: bosques, jardines, zonas verdes urbanas, etc. Volver a sentir los elementos nos reconecta con nuestra esencia.
Hipótesis de la biofilia de Wilson. Plantea que como especie hemos pasado millones de años viviendo en estrecha relación con la naturaleza. Por ello, sentimos un gran bienestar al entrar en contacto directo con el entorno natural y el resto de seres vivos que lo habitan, ya sean plantas o animales.
Beneficios de conectar con la naturaleza
Los beneficios de estar en contacto con la naturaleza son muchísimos. Ya sea dando un paseo por el bosque, poniendo bonito nuestro jardín, haciendo deporte al aire libre o yendo de excursión al campo. Simplemente el hecho de pasar tiempo en un espacio natural nos proporciona infinidad de beneficios a nivel físico, psicológico, emocional y espiritual.
Estos son algunos de ellos:
Disminuyen los niveles de estrés y ansiedad ya que se produce un descenso de cortisol (hormona del estrés) en sangre. (Estudio)
Refuerza el sistema inmunológico, esto ayuda a que enfermemos menos.
Proporciona energía, vitalidad y aumenta la autoestima.
Reduce la tensión arterial siendo una buena prevención de enfermedades cardiovasculares.
Estimula el desarrollo del cerebro favoreciendo la capacidad creativa y artística. (Estudio)
Potencia las emociones positivas y mejora el estado de ánimo.
Disminuye el dolor y la inflamación del cuerpo.
Ayuda con la absorción de vitamina D cuando estamos expuestos a los rayos del sol.
Favorece la relajación del cuerpo y la mente transmitiendo calma y propiciando los estados meditativos.
Aumenta el rendimiento cognitivo y la concentración. (Estudio)
Mejora la calidad del sueño.
Nos sentimos parte del todo, nos reconecta con nuestra esencia más pura.
Prácticas para conectar con la naturaleza
No es imprescindible vivir en el campo para conectar con la naturaleza, tampoco necesitas ir a la montaña o a un bosque todas las semanas. Si pudieras sería ideal, pero hay que ser realistas y muchas veces no es posible.
Todas las ciudades tienen jardines, parques y espacios verdes que pueden ser nuestros aliados para descargar la mente del estrés diario. Incluso si tienes un pequeño jardín en casa o plantas en tu hogar, estas también pueden ayudarte a encontrar el equilibrio físico y mental.
A continuación, te propongo algunas prácticas para que puedas conectar fácilmente con la naturaleza en el día a día o en tus escapadas de fin de semana:
Leer un libro sentad@ en un parque o debajo de un árbol. Apoya la espalda sobre el tronco para recibir sus buenas vibras.
Si tienes un pequeño terreno en casa, crear un jardín y cuidarlo con mucho amor. También puedes añadir una casita comedero para los pájaros.
Aprovechar los días de buen tiempo para organizar un picnic en la naturaleza. ¡Uno de mis planes favoritos!
Observar las aves que habitan en tu ciudad.
Practicar deporte al aire libre: bici, natación, running, yoga… ¡Un chute de endorfinas para el cuerpo!
Tener plantas y flores frescas en casa.
Las plantas no solo decoran nuestro hogar, también ofrecen otros beneficios como el aumento de los niveles de oxígeno, la depuración del aire, transmiten calma y elevan el estado de ánimo.
Incluir en tus viajes espacios verdes para visitar. Puede ser un parque, un Jardín Botánico, un bosque, etc.
Echa un vistazo al post: «Slow Travel»: Viajar con los 5 sentidos
Caminar descalz@ por la playa y bañarte en el mar. El agua del mar tiene múltiples beneficios.
Realizar rutas de senderismo. ¡Cálzate las zapatillas y sal a explorar entornos bonitos!
Escuchar la naturaleza, ya sea desde la ventana de casa o en alguno de tus paseos: el sonido del viento, el canto de los pajaritos, el crujir de las hojas bajo tus pies, el agua de un río deslizándose entre las rocas…
Escuchar los sonidos de la naturaleza alivia el estrés, potencia la relajación, la tranquilidad, el sosiego y los estados meditativos. Esto se debe a una disminución en la respuesta del sistema simpático (lucha – huida) del cuerpo y a un aumento la respuesta parasimpática (descanso – digestión).
♫ «Sonidos del Bosque» ♫ Puedes escuchar esta playlist virtual que recorre distintos rincones del mundo a través de un mapa sonoro de sus bosques.
Participar en un huerto urbano o crear tu propio huerto en casa, por ejemplo, de plantas aromáticas para cocinar.
Lleva la naturaleza a tu casa a través de aceites esenciales. Puedes aprovechar todas sus propiedades echando unas gotitas en un difusor o incluso en la bañera. La aromaterapia se utiliza para promover el bienestar físico y psicológico.
Hacer una caminata consciente. Esto significa pasear con atención plena y no pensando en las mil cosas que tienes rondando por la mente. Apartar los problemas por un momento o aprovechar cada paso para ir deshaciéndote de ellos, transmutar la energía negativa. Tómate un tiempo para apreciar toda la belleza que te rodea y conectar con la naturaleza
* Más adelante te propongo un ejercicio de mindfulness que te puede ayudar a entrenar la atención plena.
Recolectar elementos de la naturaleza para decorar en casa o para realizar actividades artísticas: pintar piedras, marcapáginas con flores prensadas, coronas con ramas, etc. ¡Creatividad al poder!
Baños de bosque – «Shinrin Yoku»
Realizar un baño de bosque consiste en dar un paseo sin prisa por el bosque o cualquier espacio natural; contemplando, escuchando, oliendo, tocando… Se trata de ser conscientes del momento, del entorno que nos rodea, conectando con la naturaleza a través de los sentidos, disfrutando de la experiencia.
Los baños de bosque, «Shinrin Yoku» en Japón, se recomiendan desde el año 1982. Los médicos lo prescriben a sus pacientes ya que forma parte del programa de asistencia sanitaria. En 2012 las universidades japonesas crearon una rama de investigación denominada Medicina Forestal.
En varios de sus estudios se ha comprobado que estar en el bosque reduce las hormonas del estrés, regula la presión sanguínea, el nivel de azúcar en sangre, previene las enfermedades cardiovasculares, refuerza el sistema inmunitario y ayuda a prevenir el cáncer.
Según el Dr. Qing Li, uno de los mayores expertos en el tema, esto se produce porque en los bosques existe una mayor concentración de oxígeno en comparación con los entornos urbanos. También por la presencia de unas sustancias que desprenden los árboles denominadas fitoncidas. Estas moléculas aromáticas son liberadas por los árboles como protección contra bacterias, insectos y hongos con importantes efectos curativos sobre nuestra salud.
En este y este estudio se dice que los baños de bosque producen tres proteínas anticancerígenas distintas e incrementan las células asesinas naturales (células NK, «Natural Killer») que son capaces de reconocer y destruir las células cancerígenas.
Dar un paseo consciente por el bosque tiene un efecto revitalizante natural. Las hormonas del estrés se reducen en un 50%, lo cual produce un incremento en el estado de ánimo, la autoestima, la concentración, la creatividad…
Cuando aprendemos a escuchar a los árboles, la brevedad, la rapidez y apresuramiento de nuestros pensamientos adquiere una alegría sin precedentes -Herman Hesse-
Como puedes comprobar, realizar un baño de bosque posee cantidad de beneficios a nivel físico y psicológico. ¿Te animas a ponerlo en práctica?
Earthing / Grounding
Caminar descalzos en contacto con la tierra permite al cuerpo reequilibrar sus cargas eléctricas. Esto impacta positivamente en la salud física y en el estado de ánimo.
Caminar descalzos sobre la tierra, la hierba, la arena de la playa, etc., fortalece los músculos, mejora la circulación sanguínea, reajusta la posición del cuerpo, calma la respiración, alivia la inflamación y activa los puntos energéticos de la planta de los pies liberando el estrés y contribuyendo al bienestar general. (Estudio)
El ser humano ha caminado descalzo durante millones de años. El paso de vivir en la naturaleza a un entorno urbano, nos ha ido aislando del contacto con la tierra: zapatos, asfalto, material sintético, etc., impiden esta conexión.
Sería ideal buscar momentos en la semana para caminar descalz@ sobre alguna superficie natural, ya sea por la playa, en el campo o si tienes jardín, pasar un ratito con los pies desnudos sobre la tierra o la hierba. También puedes tumbarte, cuanta más superficie de piel tengas en contacto con el suelo, mejor. Esto permite que la energía eléctrica de la naturaleza actúe equilibrando el organismo.
A mí me encanta ir al parque y sentarme descalza a leer un libro o relajarme tomando el sol en el buen tiempo. Esa sensación de tocar con la planta del pie la hierba fresquita o una superficie mullidita es muy agradable y súper relajante. ¿Lo has probado?
La importancia de la naturaleza en los niños y niñas
Un porcentaje muy alto de los niñ@s que viven en la ciudad, pasan prácticamente todo el día en espacios cerrados, sentados, con agendas llenas de actividades, cada vez más conectados a la tecnología y más desconectados de la naturaleza. Para muchos de ellos su único rato de juego al aire libre es en el patio del colegio.
Richard Louv en su libro «Los últimos niños en el bosque» lo denominó: Trastorno por déficit de naturaleza. Un síndrome que afecta a los niñ@s que viven alejados del contacto con entornos naturales, manifestando hiperactividad, obesidad, estrés, dificultades en el aprendizaje, fatiga crónica o incluso depresión.
Diversos estudios afirman que los niños que viven en zonas rurales enferman menos, tienen mejor coordinación física, equilibrio, agilidad, son más imaginativos, observadores, tienen mejor concentración y capacidad para trabajar en grupo.
En cambio, los niños de la ciudad son más temerosos, nerviosos, inseguros, sedentarios, tienen problemas de sobrepeso, desórdenes del sueño, desarrollan más alergias o se aburren más. Viven en ambientes cerrados y protegidos, sus padres están demasiado preocupados por su seguridad y evitan que se ensucien.
Es necesario que los niños se manchen, que exploren, que toquen… Necesitan experimentar para descubrir el entorno que les rodea y desarrollarse de forma integral.
Beneficios de conectar con la naturaleza en los niños/as
La interacción con la naturaleza favorece un buen desarrollo cognitivo, físico, emocional y relacional en los niños/as. Estos son algunos de sus beneficios:
Mejoran la coordinación física, el equilibrio y la agilidad, ya que los espacios naturales invitan a correr, saltar, trepar y moverse libremente.
Les protege de enfermedades en las vías respiratorias al respirar aire limpio.
Influye positivamente en la capacidad de aprendizaje, concentración y memoria.
Disminuyen los niveles de estrés y tristeza.
Favorece la seguridad y confianza en uno mismo.
Crean una conciencia ambiental y el respeto por el entorno que les rodea.
Alimenta la imaginación estimulando sus habilidades creativas y artísticas.
Potencia el juego libre e influye en sus habilidades sociales y de convivencia con los demás.
Favorece y refuerza sus procesos de aprendizaje, además, descubren otras formas de vida.
Actividades para hacer en la naturaleza con niños/as
Es muy importante fomentar el juego al aire libre, hacer escapadas en familia, vacaciones o fines de semana en entornos naturales. Que se relacionen con las plantas, los árboles, la tierra, los animales y otros elementos de la naturaleza. Te dejo algunas ideas.
Observar la flora (árboles, hojas, flores…) y la fauna (aves, insectos…).
Bañarse en un pantano, en el mar o en un río.
Visitar Parques Naturales.
Hacer excursiones en bici.
Recolectar frutos: moras, setas, castañas…
Hacer un muñeco de nieve.
Construir casetas, trepar a un tronco, tirar piedras a un río…
Hacer un picnic en el campo.
Plantar semillas y cuidarlas.
Observar el cambio de las estaciones.
Construir castillos de arena.
Ir a campamentos en la naturaleza o hacer una acampada en familia.
Realizar rutas de senderismo.
Contemplar las estrellas.
Recolectar elementos de la naturaleza y hacer manualidades con ello.
Es necesario que aprendan de la naturaleza no solo a través de los libros o la televisión. Que lo experimenten vivenciándolo en primera persona.
Ninguna descripción, ninguna ilustración de cualquier libro puede sustituir a la contemplación de los árboles -María Montessori-
Como conclusión, podemos decir que los niños que tienen contacto habitual con entornos naturales, se desarrollan de manera mucho más saludable
Iniciativas en el mundo
Conectar con la naturaleza tiene un impacto tan positivo en nuestra vida, que a lo largo del mundo se están creando iniciativas súper interesantes. Te dejo algunos ejemplos:
En Singapur se ha creado el hospital jardín Khoo Teck Puat para sanar con ayuda de la naturaleza. Todo un paraíso verde que recorre las instalaciones con más de 700 especies nativas de plantas y árboles.
En Noruega el Hospital Universitario de Oslo y la Fundación Friluftssykehuset han impulsado un proyecto de cabañas en la naturaleza que ofrece a los pacientes alejarse del entorno hospitalario durante un tiempo. Allí pueden estar solos o con su familia en un espacio privado y rodeados de naturaleza.
En Canadá se acaba de poner en marcha el proyecto ‘A Prescription for Nature’ PaRx en el que los médicos podrán recetar a sus pacientes pases anuales gratuitos a los Parques Nacionales del país.
En Australia el gobierno en colaboración con Parks Victoria ha creado el programa «Healthy Parks Healthy People» para promover los beneficios que ofrecen los parques urbanos, las áreas naturales y los parques nacionales como un recurso para la salud y la calidad de vida de la población.
Los días 5, 6 y 7 de julio de 2024 se celebra el Timber Festival en el bosque de Feanedock (Reino Unido). Un evento para los amantes de la naturaleza donde habrá música, arte, conferencias y mucha conexión con el mundo natural.
Mi experiencia personal y profesional
Mi experiencia tanto personal como profesional en la naturaleza es súper positiva.
Hasta hace 4 años, durante toda mi vida he vivido en un pueblo pequeño en la provincia de Palencia. Abrir la puerta de casa, andar unos metros y solo escuchar a los pajaritos, el agua del río, estar rodeada de arbustos, flores y tierras de cultivo es una maravilla.
Cuando me sentía agobiada por algo, salir a dar un paseo sin rumbo era mi vía de escape.
En la naturaleza he encontrado refugio, un lugar donde dejar ir los problemas, donde descargar tensiones e incluso si estaba bloqueada creativamente, durante un paseo aparecía como por arte de magia la inspiración o esa solución a algo que llevaba horas dando vueltas en casa.
Puede sonar un poco místico pero te prometo que es así. Un paseo por la naturaleza es belleza, calma e inspiración.
Ahora que vivo en Gijón, aprovecho para ir a la playa (fuera de temporada porque busco tranquilidad), hago excursiones, rutas y picnics en entornos naturales.
Desde que llegó la pandemia, sentí mucha más necesidad de estar en contacto con la naturaleza. Cuando veo un rayito de sol intento salir a recargarme de energía. Para mí el sol es muy importante, me aporta energía y positividad.
También estoy poniendo en práctica el earthing. Doy paseos descalza por la playa o por el césped de algún parque. Es una sensación muy placentera, noto que la tensión del cuerpo se reduce, me siento ligera y con más bienestar físico y mental.
Espiritualmente también me encuentro más conectada a la tierra, agradezco ver un amanecer o atardecer, cada flor bonita que encuentro a mi paso, la sombra y el oxígeno que proporcionan los árboles, es una sensación de unión, de formar parte del todo.
A nivel profesional, cuando he trabajado como educadora social, la naturaleza ha estado presente en muchos momentos.
Durante la época que trabajé haciendo terapia en un hospital psiquiátrico, pude comprobar de primera mano cómo conectar con la naturaleza ofrece grandes beneficios a nivel psicológico.
Este hospital posee muchas zonas verdes con árboles y jardines donde los pacientes salen a pasear. Creo que eso es súper importante para complementar el tratamiento médico y psicológico.
También tuve la oportunidad de trabajar allí como monitora de jardinería durante un tiempo. Fue toda una experiencia comprobar como aprender a plantar semillas, regar o cuidar las plantas les ayudaba a estar más calmados, a sentirse útiles y, por lo tanto, a elevar su autoestima.
Cuando he trabajado con niñ@s en escuelas de verano, era de gran importancia para mí que tuvieran tiempo de juego libre, a poder ser en la naturaleza.
Recuerdo una de mis primeras escuelas de verano en un pueblo pequeñito cerca del mío. Un día se me ocurrió que podíamos ir de excursión al río para cambiar de aires y que no solo estuvieran en el parque o en el edificio donde hacíamos actividades.
Al principio me dio un poco de «miedo» porque era yo la única monitora a cargo de 10-12 niños y niñas. Era una responsabilidad importante llevarlos a las afueras del pueblo y, sobre todo, cerca de un río… ¡Ya sabemos que con los niñ@s hay que tener mil ojos!
Al final, decidí probar a ver cómo reaccionaban, no sabía si se aburrirían ya que no llevábamos ningún juguete, ni balones… Para mi sorpresa, ¡fue todo un éxito!
Cuando llegamos a la ribera, ellos mismos formaron sus grupos de juego; algunos empezaron a construir una caseta con ramas, otros cogieron unos palos simulando cañas de pescar, otro grupito jugaba a tiendas vendiendo piedras, palos, hojas…
Está claro que los niños se sienten genial en la naturaleza, incluso los más introvertidos se mostraban más abiertos y receptivos jugando libremente en la naturaleza.
¡Les gustó tanto la experiencia que después me pedían repetir la excursión al río todos los días!
Mindfulness en la Naturaleza
Te propongo realizar un paseo consciente por la naturaleza. Poniendo los 5 sentidos, sin ningún objetivo concreto, solo estar aquí y ahora. Para ello es muy importante que desconectes el teléfono, que pares el bucle mental de pensamientos y que adoptes la actitud curiosa de un niñ@.
Dirígete a un entorno natural que te guste: campo, montaña, playa, bosque, jardín, etc.
Cuando llegues, antes de comenzar el paseo, presta atención a tu respiración, realiza varias inhalaciones y exhalaciones profundas, llena bien los pulmones de oxígeno, baja las pulsaciones, relaja el cuerpo y conecta con el momento presente. Ya estás preparad@ para iniciar el paseo.
Comienza caminando poco a poco, siente cómo las plantas de los pies entran en contacto con el suelo a cada paso. Si tienes la posibilidad, puedes descalzarte en algún momento para sentir aún más ese contacto con la tierra.
Ahora presta atención a los sonidos. ¿Qué escuchas? Puede que sea el canto de los pajaritos, el arrullo del viento meciendo las ramas de los árboles, el agua que fluye por un río, el crujir de las hojas secas bajo tus pies, el mar rompiendo contra las rocas… Quédate ahí un momento, déjate llevar por la sinfonía de la naturaleza.
Prosigue el camino lentamente, no te despistes, no permitas que la mente entre en juego sacándote del momento presente.
Ahora vas a adoptar la actitud de un niño que observa algo por primera vez con emoción y curiosidad. Contempla qué ocurre a tu alrededor, los colores, las texturas ¡investiga! ¡toca! ¡siente! Desliza las manos por el tronco de un árbol palpando su rugosidad, nota lo fresco y mullidito que está el musgo, disfruta del olor a bosque, de la brisa del mar, contempla la fragilidad de una flor…
La naturaleza está viva y tú formas parte de ella. Siente esa conexión con lo que te rodea, llena tu retina de belleza.
Cuando lo consideres oportuno, pon fin a este paseo consciente. Para ello, puedes buscar un lugar donde sentarte tranquil@: debajo de un árbol, sobre una roca, en la arena de la playa… Cierra los ojos y agradece el momento que acabas de vivir. Da gracias a la naturaleza por todos sus beneficios y por este momento de conexión tan bonito que has experimentado.
Deseo que lo disfrutes mucho
Libros sobre naturaleza
En este apartado vas a encontrar algunos libros relacionados con la naturaleza. Hay un poquito de todo, desde cuentos hasta libros de temáticas concretas como los baños de bosque.
¡Te recomiendo mi «Guía para vivir en armonía con las estaciones»! Descubrirás un montón de ideas para conectar con la energía de las diferentes estaciones: alimentos de temporada, conexión con la naturaleza, minduflness y meditaciones, infusiones y hierbas, ideas para tu hogar, salud y medicina tradicional china, fases lunares, altar y ritual de bienvenida a las estaciones, etc.
Con calma. 50 historias de la naturaleza.
Los últimos niños en el bosque.
Shinrin-yoku. El arte japonés de los baños de bosque.
Earthing: con los pies descalzos.
Educar en verde: Ideas para acercar a niños y niñas a la naturaleza.
La vida secreta de los árboles.
Estamos aquí: Notas para vivir en el planeta Tierra.
El poder del bosque. Shinrin-Yoku.
Bosquescuela: Guía para la educación infantil al aire libre.
El lenguaje secreto de la naturaleza: Descubre la inteligencia y las emociones de animales y plantas.
Shinrin-yoku: Baños curativos de bosque.
En un metro de bosque: un año observando la naturaleza.
Por los bosques. Los árboles son nuestra salvación.
El pequeño libro de los baños de bosque
Aquí concluye este reportaje sobre conectar con la naturaleza. Han sido muchas horas de investigación, de revisar mi propia experiencia a lo largo de los años, de leer estudios, libros… De hecho, he tenido que dejar mucha información fuera para que el artículo no fuera excesivamente largo. Mi idea es seguir escribiendo otros posts más adelante ampliando la información o incluso recopilar todo en un ebook. ¿Qué te parece la idea?
Cuéntame… ¿Con qué frecuencia te tomas un tiempo para conectar con la naturaleza? ¿Conocías todos los beneficios que nos aporta?
Katia dice
El artículo es ¡BRUTAL! Me ha encantado Tania. Deseando leer más?
Tania dice
¡Qué ilusión Katia! ♥ Muchísimas gracias 🙂
Lina D dice
Me ha encantado tu artículo. Muy completo. Muchas gracias por la lista de libros y todo lo demás.
Tania dice
¡Me alegro! Gracias a ti por leerlo 😀
Nuria dice
Qué buen artículo. Yo me defino «de asfalto» pero es absolutamente cierto todo lo que comentas. En mi caso particular es la arena de la playa en los pies y el olor y sonido del mar lo que me sana.
Tania dice
A mí me gusta la ciudad, pero necesito mis momentos de naturaleza varias veces a la semana. Cada vez más…
Estoy de acuerdo, los paseos por la orilla del mar son muy sanadores ♥
¡Un abrazo!